Autora: Luna
Hospital Universitario Puerta de Hierro
Emociones que encontrarás en este cuento: ilusión y esperanza
Supongo que ser una estrella no es algo que muchos humanos deseen, debe de ser inusual reflexionar acerca de lo que es una estrella. Lo cierto es que ser una estrella no es tarea fácil ni mucho menos, requiere fuerza, positividad y valentía, mucha valentía. Se nos suele considerar débiles, lo contrario de longevas si te paras a pensarlo. La vida de una estrella es mucho más de lo que se suele asumir, es tratar de no parar de brillar en ningún momento, mientras intentas alumbrar a tus compañeras del cielo, sin olvidarte de brillar de una forma adecuada o al menos respetable para la máxima estrella: El sol.
Mantener el balance de todas estas cosas puede resultar en el peor de los destinos: dejar de brillar. Os seré sincera, solo he dicho esto último para añadir intriga a mi relato. La bonita verdad es que eso nunca sucede. Sin importar todo lo que trate de apagarnos, para algo somos estrellas. El brillo nunca se apaga, siempre permanece. Lo único que hay que hacer es creer y confiar, manteniendo las tres cualidades que he mencionado: fuerza, positividad y valentía. La más bonita de las verdades es que no hace falta ser estrella para tener luz y brillar.
